CHAPINGO, ESTADO DE MÉXICO.- Buscando la seguridad alimentaria del país, la Universidad de Chapingo presentó dos proyectos en materia de captación de agua pluvial y producción de maíz.
Sergio Barrales, rector de esta casa de estudios, indicó que ha llegado el momento de mirar a la agricultura en su justa dimensión, es decir, como proveedora de alimentos para así lograr la sustentabilidad alimentaria del país.
“Si en el país hay la intención de que alcancemos la autosuficiencia alimentaria y sobre todo que vayamos a la soberanía alimentaria que implica producir nuestros propios alimentos e implica conservar nuestro arte culinario, si alguien toma esa decisión nosotros podemos contribuir”.
Con relación al proyecto de captación de agua de lluvia para uso doméstico, este fue promovido por el Laboratorio de Tecnologías Hídricas Innovadoras del Departamento de Irrigación de la Universidad Autónoma de Chapingo como respuesta a la necesidad de contar con agua disponible.
Según apunta la institución, en la actualidad hay 14 millones de mexicanos que no tienen acceso a agua potable o entubada, por lo se que buscó a familias poseedoras de inmuebles en estas localidades para implementar el proyecto que consta de capacitación para que las personas aprendan a captar agua y cuenten con su propio módulo para hacerlo.
Por otro lado, una de las características de este proyecto es que las tecnologías es que sean artesanales, de fácil adopción y de bajo costo, que los materiales estén al alcance de su comunidad.
Dichos módulos tienen capacidad de almacenamiento de más de 12 mil litros por casa para así poder garantizar el derecho humano de consumo de agua, aunado a la entrega de filtros de purificación para limpiar hasta 600 litros de agua al mes.
Hasta el 31 de diciembre de 2016 se entregaron 63 módulos, ello en beneficio de 45 familias rurales y de 15 escuelas, que impactaron de manera directa a 180 personas y a mil 500 estudiantes.
En tanto, el ingeniero de la institución, Gerardo Noriega, explicó que el maíz es parte de la cultura mexicana y se cultiva en dos mil 300 municipios del país, con un rendimiento medio de 3.3 toneladas por hectárea, lo que ha llevado a que en los últimos años se acuda a las importaciones de alimentos.
Así refirió que 44 por ciento de los costos de producción de maíz en los sistemas de producción agrícola podrían ser impactados por el precio del dólar y 13 por ciento por el precio del combustible.
Por ello, el proyecto presentado por el investigador, que ya se desarrolla en el Valle del Mezquital, en Hidalgo, tiene que ver con la restauración de la fertilidad del suelo para así incrementar el rendimiento y reducir los costos de producción, ello, en materia de energía, fertilizantes de síntesis química y de plaguicidas.
La tecnología desarrollada en la Universidad Autónoma de Chapingo se cuenta con un costo de producción de maíz de alrededor de mil 400 pesos por tonelada, en comparación con el precio del mercado de alrededor de tres mil 800 pesos, lo que resulta atractivo para los productores.
con información de la Universidad Autónoma de Chapingo
jcrh