Aunque solo mide unos centímetros, pez sufre de depresión cuando lo separan de su media naranja, las hembras al aparearse con quien no es de su preferencia se deprimen.

Un grupo de investigadores franceses estudió el comportamiento de este cíclido cebra, cuyo nombre científico es Amatitlania siquia.

Este pez, conocido por ser monógamo y fiel, se deprime cuando no está con su pareja.

Por su parte, las hembras cuando son apareadas con un macho que no es el de su preferencia, tienen un comportamiento «pesimista».

Los científicos estiman que algunas especies de peces evolucionaron de manera a contar con parejas fieles, como una manera de proteger a sus descendientes extremadamente vulnerables frente a los depredadores.

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Estudio confirma cuando pez sufre de depresión

Para medir la respuesta mental de un ejemplar a una separación, los investigadores de la Universidad de Borgoña en Francia entrenaron a las hembras a utilizar sus bocas para abrir dos cajitas. Cada una es ubicada en un extremo de sus acuarios.

La caja «positiva» contenía comida y la «negativa» estaba vacía. Las tapas eran o bien blancas o negras para que pudieran distinguirlas.

Los científicos colocaron luego una caja gris «ambigua» en el centro del acuario para ver cómo reaccionaban las hembras.

Observaron que las optimistas abrían en seguida la caja gris con la esperanza de hallar un festín. Las pesimistas dudaban e incluso ignoraban el objeto.

El estudio demostró que las hembras pasaban más tiempo tratando de abrir las cajas grises cuando sus parejas se hallaban en los acuarios con ellas.

François-Xavier Dechaume-Moncharmont, profesor en comportamiento animal de la Universidad de Borgoña declaró:

En vista de los resultados, «podemos imaginar que el apego emocional es algo útil para la pareja y que presenta un interés evolutivo».

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