A pesar de dar un partido inteligente, México pierde la final.

El primer tiempo se fue susto tras susto para los mexicanos, pues los locales tuvieron varias oportunidades, entre ellas un par de balones a los postes.

Sin embargo, los chamacos compatriotas supieron controlar los ánimos, como lo han mostrado en los anteriores partidos, y lograron irse con el empate al descanso.

Vaya que el «Chima» Ruíz ha hecho un trabajo mental interesante, pues ni con Holanda en la semifinal ni con Brasil, en su casa, los nacionales se achicaron.

Al contrario, mostraron agallas, determinación y una concentración envidiable, lo que llevó que el segundo tiempo las cosas se emparejaran.

Pues la Selección Mexicana tuvo algunas oportunidades que no supieron aprovechar, pero que a los brasileños enojó, pues empezaron a repartir patadas.

El mejor jugador de México en este Mundial, Efraín Álvarez salió después de el tercer cuarto de los 90 minutos, pues físicamente no se encontraba al 100%.

Quizás haberlo utilizado como con Holanda, como sorpresa en el segundo tiempo, hubiese sido una buena jugada.

Pero es la final y sólo el Director Técnico sabe cómo organizar a su equipo para saborear la gloria.

México pierde la final ante el anfitrión Brasil

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Y vaya que le funcionó, pues después de los enojos y patadas de los locales, los mexicanos apagaron al Estadio con un gol al minuto 65.

Bryan González mete un cabezazo, a centro del capitán Pizzuto, que dejó sin opciones al cancerbero brasileño y México noqueó a los locales.

México perdió un poco el control del partido y al minuto 82 se marcó un penal en favor de los locales tras la intervención del VAR.

El penal que casi atajó Eduardo García desconcertó a los nacionales que se veían ya en penales y al minuto 93, Brasil anotó el gol del campeonato.