Los papás de un bebé de dos meses de edad, irán a la cárcel por acabar con la vida de su hijo que, dijeron, los «interrumpió» cuando mantenían relaciones sexuales.

Se trata de Luke Morgan y Emma Cole, quienes se encontraban en un encuentro íntimo cuando escucharon el llanto del pequeño Tyler.

Por ello, el hombre lleno de rabia lo golpeó hasta que dejó de llorar.

Tras eso, regresó con su esposa y continuó con la relación sexual.

Sin embargo, horas más tarde, ya de madrugada, la madre del menor se percató de que su hijo no respiraba.

Decidió llamar a emergencias. Mientras tanto, intentó dar reanimación cardiopulmonar al infante.

Finalmente los paramédicos llegaron a la casa y confirmaron que Tyler no tenía signos vitales.

El menor tenía, además de los golpes, una marca de un mordisco y las costillas fracturadas.

Esto último a causa de la reanimación mal practicada que recibió de parte de su mamá.

Esta terrible historia ocurrió en Burntwood, Inglaterra.

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Cárcel

Las autoridades señalaron una causa de muerte probable entre todas las lesiones que presentó el bebé que «interrumpió» a sus papás.

Fue la presión en el pecho, que la madre del menor aplicó al intentar reanimarlo, la que posiblemente le arrebató la vida.

La pareja ya fue llevada a juicio. Durante el proceso se reveló que el padre maltrataba al infante desde que nació.

Otro factor fue que la pareja se encontraba en aparente estado de ebriedad el día que dieron muerte al pequeño.

Según la policía de Stafford, el varón, de 26 años, recibió una condena de ocho años de prisión.

La madre, de 22, fue condenada a cinco años de cárcel.

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