- La CDMX presentó las reformas a la Ley de Turismo de la capital para regular a plataformas digitales de hospedaje como Airbnb.
- El objetivo de estas es frenar la gentrificación, beneficiar al sector hotelero al evitar la competencia desleal y brindar seguridad a los turistas y usuarios de estas plataformas.
- Con esta medida, la CDMX se une a grandes urbes —como Nueva York, París, Berlín y Barcelona— que ya regulan el uso de plataformas de hospedaje.
Este jueves el Jefe de Gobierno de la CDMX, Martí Batres, presentó las reformas a la Ley de Turismo de la capital para la regulación de plataformas digitales de hospedaje como Airbnb, en un intento por frenar la gentrificación y beneficiar al sector hotelera de la capital.«Hoy publicamos las reformas a la Ley de Turismo para regular el alojamiento a través de plataformas digitales. Estas reformas protegen a los vecinos de la Ciudad de México de los procesos de gentrificación, desplazamiento y expulsión de los barrios donde han hecho su vida», dijo Batres en
una publicación de X.El jefe de gobierno agregó que estas reformas buscarán beneficiar al sector hotelero al evitar la competencia desleal; brindar seguridad a los turistas y usuarios de hospedaje temporal, y dar certeza jurídica a las plataformas y dueños de inmuebles.Con esta medida, la CDMX se une a grandes urbes —como Nueva York, París, Berlín y Barcelona— que ya regulan las plataformas de hospedaje.Airbnb compartió con
Business Insider México la siguiente postura frente a la nueva regulación:
Para Airbnb es fundamental contar con reglas claras que den certeza a Anfitriones, viajeros, comunidades locales, plataformas y autoridades, con el objetivo primario de mantener en equilibrio la actividad turística, la derrama económica, la preservación del patrimonio cultural y natural y la buena convivencia con vecinos y comunidades locales.Este es el primer paso que define y regula la actividad en la Ciudad de México y Airbnb se encuentra a disposición para seguir aportando su experiencia de cooperación con el gobierno de la Ciudad de México, como lo ha hecho en otras ciudades en el mundo. ¿Qué exige la nueva regulación a plataformas digitales de hospedaje como Airbnb?
La iniciativa —que entró en vigencia el jueves con su publicación en la Gaceta Oficial— viene trabajándose desde noviembre del año pasado, cuando Batres la envió al Congreso de la CDMX.Entre los cambios más relevantes a la ley está que las plataformas digitales de hospedaje deberán registrarse en el Padrón de Plataformas Tecnológicas autorizadas para operar en la CDMX.Las plataformas deben exigir a los anfitriones estar inscritos en el Padrón de Anfitriones, mostrar los datos de registro en la página o aplicación, cumplir con obligaciones fiscales e informar semestralmente a la Secretaría de Turismo sobre la ocupación de cada inmueble registrado.La vigencia del registro de plataformas será de dos años y la de inmueble de un año, debiendo ser renovados 30 días antes del vencimiento.
¿Qué exige a los anfitriones?
Por su parte, los anfitriones (tanto individuos como empresas que ofrecen hospedaje a través de plataformas como Airbnb, Booking, Tripadvisor o Trivago) deberán estar registrados en el Padrón de Anfitriones; la constancia y el folio de registro tendrá que estar disponible para consulta de los potenciales usuarios de los alojamientos.Otro de los cambios importantes es que los anfitriones no podrán registrar más de tres propiedades en el padrón. En caso de registrar un cuarto inmueble, deben obtener un registro de establecimiento mercantil asignado por el SIAPEM, correspondiente a uno de los giros permitidos por la ley.La Secretaría de Turismo puede eliminar los registros del cuarto inmueble en adelante si el aviso de funcionamiento no es válido o si el uso de suelo no permite el giro señalado en el aviso o permiso presentado.Otras obligaciones de los anfitriones incluyen proporcionar información detallada a los turistas; notificar a los vecinos sobre el uso turístico de la propiedad y exhibir números de emergencia de la CDMX.Los anfitriones también deben cumplir con obligaciones fiscales, proteger datos personales de los turistas, mantener instalaciones seguras e higiénicas, y ofrecer un mecanismo de contacto para quejas.