La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró las operaciones de la Terminal Marítima de Mexicana de Cobre, filial de Grupo México, localizada en Guaymas, Sonora, por el derrame de tres mil litros de ácido sulfúrico en el Mar de Cortés.

El acto se llevó a cabo, pese al pronunciamiento de López Obrador cuando declaró que primero escucharía a la empresa, antes de sancionarla.

Según publicó Grupo México, el vertimiento ocurrió por una falla en las válvulas de las tuberías durante un proceso de trasvase en la Terminal Marítima de Guaymas.

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Fue Abraham Larios, administrador general de API Guaymas, quien detalló que los empleados de esta empresa, al notar la fuga, cerraron las válvulas y activaron un rebombeo para que el líquido regresara.

Sin embargo, no fue suficiente pues tres mil litros alcanzaron a llegar a las aguas de este mar.

“Grupo México es el responsable de esta falla y los eventuales daños deberán ser reparados a la brevedad por esa empresa”, declaró el funcionario.

Por su parte, los acusados explicaron que el derrame fue a las 15:00 horas del 9 de julio, en la Terminal Marítima de Guaymas.

Por ello, aplicaron las medidas necesarias para el caso.

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López Obrador se pronunció y dijo que escuchará a la empresa, antes de tomar medidas “drásticas”.

El mandatario quiere reunirse con directivos de la empresa para saber qué fue lo ocurrido.

“Tenemos que tener todos los elementos, escuchar a la empresa, dialogar y antes de tomar una medida drástica, buscar un acuerdo porque tenemos que cuidar las fuentes de trabajo”, afirmó.