Contingencia en la CDMX, «El Niño Maravilla» vuelve a la vida y con el narco infiltrado en la justicia… todo junto parece un terrible filme de horror.

Lo bueno

La Secretaría de Hacienda, a través de Santiago Nieto Castillo, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), hizo el gran anuncio.

Y es que el funcionario señaló que congelaron las cuentas de un magistrado de Jalisco.

¿Por qué? El hombre de la ley habría liberado a dos hombres ligados al Cártel Jalisco Nueva Generación a cambio de una «lanita».

Según las investigaciones de la UIF, las cuentas bancarias del magistrado y de otras personas relacionadas a él, recibieron unos 50 millones de pesos.

El extraño movimiento no pasó desapercibido y por ello, dichas cuentas fueron congeladas.

Esto es bueno, sí, pero podría ser aún mejor.

Falta la otra parte de las autoridades a la hora de hacer justicia, y eso hay que exigirlo, pero es un buen inicio que los recursos ilícitos puedan ser confiscados.

Lo malo

El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) determinó que la PGR afectó a Ricardo Anaya en las elecciones presidenciales al «exponerlo».

Esto luego de las acusaciones de lavado de dinero que pesaron sobre el candidato durante la campaña electoral.

Por ello habrá algunos castigos y eso está perfecto, lo malo es la facilidad con la que nuestro sistema democrático puede ser vulnerado.

Así como le tocó a Anaya pudo ser también para AMLO, quizá ya lo fue en alguna elección pasada.

¿Cómo garantizar que esto no volverá a ocurrir?

Parece un claro indicador de que el PRI de Enrique Peña Nieto metió su mano hasta donde pudo para desprestigiar a un candidato y, seguramente, favorecer al propio.

Al final, el tiro les salió por la culata, pues AMLO arrasó en las elecciones.

Pero, y aquí va otra interrogante, si esto pasa frente a todos los reflectores de una elección presidencial, ¿qué ocurrirá en comicios a un nivel más discreto?

Hechos que sólo confirman lo corrompida que está la democracia en este país.

¿Y el INE dónde quedó?, por cierto.

Lo feo

La contingencia en la CDMX es grave y las medidas que se han tomado al respecto son insuficientes.

Tan es así que se reveló que la austeridad de la administración de López Obrador obligó a la suspensión de algunos programas que combaten los incendios en el Valle de México.

Si de entrada lo que se hacía antes no era suficiente para cuidar el ambiente, ahora menos.

Y es cierto, hace falta el apoyo de la ciudadanía y un cambio de hábitos en toda la ciudadanía.

Sin embargo, también faltan acciones urgentes del Gobierno para revertir la situación.

Para nadie es un secreto que las ciclovías son peligrosas, que el transporte público es inseguro e ineficaz, que las fábricas contaminan a diestra y siniestra, o que la verificación vehicular y el Hoy no circula no son suficiente.

Claudia Sheinbaum tiene aquí la oportunidad de hacer un cambio real y de ejercer toda la experiencia que adquirió como secretaria de Medio Ambiente del entonces Distrito Federal que gobernaba López Obrador.