Cuando éramos niños y salíamos a pasear con nuestros papás, siempre nos dijeron que no debíamos jugar en las fuentes públicas o la policía nos iba a llevar.

Al parecer los papás de estos perrhijos no lo sabían, pues dejaron que sus bendiciones jugaran en el agua puerca y pues los tuvieron que remitir.

A través de redes sociales comenzó a circular un video en el que aprecia el momento en el que una mujer y sus dos perros son llevados en una patrulla.

El narrador del video señala que los policías detuvieron a la madre y a sus dos perrhijos en una parque de la alcaldía Cuauhtémoc.

Los policías auxiliares argumentaron que el motivo de la detención es que uno de los perros se metió a una fuente.

La grabación muestra el momento exacto en el que suben a la patrulla para ser trasladados a un juez cívico, ante la falta cometida.

La pareja quería irse junta en el taxi, pero los oficiales argumentaron que «no era taxi».

Los usuarios hicieron burla de la detención de los canes por simplemente jugar en una fuente. Lo que no sabían es que esto es considerado una falta cívica.

El delito de los perritos

De acuerdo con la Ley vigente de Cultura Cívica de la CDMX, en el artículo 24 señala:

«Son infracciones contra la tranquilidad de las personas: II. Poseer animales sin adoptar las medidas de higiene necesarias que impidan hedores o la presencia de plagas que ocasionen cualquier molestia a los vecinos».

Además de eso, en caso de que el juez lo considere, las infracciones establecidas en las fracciones I y II se sancionarán con multa.

Misma que equivale de 1 a 10 veces la Unidad de Cuenta de la Ciudad de México vigente o con arresto de 6 a 12 horas.

De acuerdo con el diario Milenio, el hombre denunció los hechos en una página de Facebook, donde alegó que su mujer no tendría derecho a pagar multa y debía permanecer encarcelada hasta cumplir sus horas.