* El mismo Munch anotó el verdadero significado de su obra en una versión en blanco y negro de la pintura
* La pintura inspiró la creación del emoji de “persona que grita”, el 53º más empleado en el mundo
¡Hemos vivido engañados! La figura en la icónica obra de Edvard Munch, El Grito, en realidad no grita. El verdadero significado de esta pintura es peor…
El miércoles, el Museo Británico, declaró que, opuesto a lo que se cree, el personaje reacciona a un grito.
De acuerdo con el expertos del museo, Munch lo dejó claro en una anotación. La inscripción puede verse en una versión en blanco y negro de la pintura. Munch anotó:
“Sentí el gran grito en toda la naturaleza”
Giulia Bartrum, quien realiza la curaduría del Museo Británico, dice que esto demuestra que la figura reacciona a un grito. “Munch fue muy claro con esta inscripción”, explicó.
Agregó que la famosa figura reacciona a las fuerzas externas de la naturaleza. Incluso pueden verse trazadas en las montañas del fondo.
Así, el personaje central del cuadro en realidad se tapa los oídos ante el grito de la naturaleza.
De acuerdo con Bartrum, lo que todavía está en discusión es si, para Munch, esas fuerzas eran reales o psicológicas.
Munch, un artista noruego, terminó la primera pintura en 1893. Sin embargo, realizaría diferentes versiones en los años siguientes.
Desde su creación, la imagen ha cambiado poco a poco de significado. Actualmente es común verla empleada como una representación de ansiedad.
Incluso, la pintura inspiró la creación del emoji de “persona que grita”, el 53º más empleado en el mundo.
Imagen: Wikimedia