*Viaje de placer termina en pelea campal por culpa de pasajero «pedorro»; él no tenía mal humor, tenía mal olor
Lo que se suponía que sería un viaje de placer y relajación terminó en pelea campal entre tres pasajeros de un vuelo comercial.
Resulta que todo comenzó por unas cuantas flatulencias; al parecer uno de los pasajeros tuvo algunos problemas al controlar sus gases y esto desató una batalla campal en pleno vuelo.
En un principio los pasajeros cercanos al hombre de las flatulencias se sintieron algo incómodos, pero con el paso de los minutos y el aumento en la potencia de los gases, éstos no pudieron soportar más.
Algunos reportaron que de un momento a otro parecía que el sujeto pedorro lo hacía con todo gusto y alevosía, lo que desató la ira de dos de los pasajeros que se le fueron encima con todo.
Pagan justos por pecadores
Cuando la tripulación se percató de lo que ocurría a bordo, algunos de ellos mencionaron que “no tenían manera de frenarlo”, (al pedorro).
Y aunque intentaron evitar que el gaseoso encuentro llegara a mayores, no lo lograron, pues cuando menos se dieron cuenta los sujetos ya tiraban de puñetazos.
Por este incidente el capitán del vuelo se vio obligado a aterrizar en Viena, donde un grupo de policías intervino para bajar a los sujetos del avión.
Pero eso no fue todo, en todo este drama, cuatro pasajeros, ajenos a la pelea también fueron bajados del avión.
Dos de ellos por el descontento y por el hecho de no soportar estar en la “cabina de gases”, así como dos mujeres de ascendencia holandesa y marroquí.
En el caso de las mujeres, procedieron con una denuncia en contra de la aerolínea por el mal servicio, pero sobre todo por discriminación, pues el único “delito” que cometieron fue estar en la misma fila que el “pedorro”.
Imagen: Especial