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- Se suspendió la cotización de Twitter en Wall Street luego de que Bloomberg reportara este martes el posible acuerdo de compra con Elon Musk.
- El multimillonario justificó su marcha atrás sobre el pacto de compra, con que la proporción de cuentas automatizadas era superior a 5% que la empresa declaraba.
- Si la operación de compra finalmente se concreta, el riesgo de que los reguladores se opongan es bajo, según Dan Ives.
Elon Musk propuso el lunes comprar Twitter al precio convenido en abril, según informaciones de prensa. Esto a dos semanas del inicio de un juicio previsto entre las dos partes sobre esta tumultuosa operación.
La cotización de Twitter fue suspendida en Wall Street «en espera de informaciones», luego de que la agencia Bloomberg reportara el posible acuerdo de compra de la red social por parte de Musk.
La acción congeló sus operaciones durante cinco minutos primero; se disparó hasta 18% antes de ser nuevamente suspendida.
Según Bloomberg, Musk envió una carta a Twitter el lunes proponiendo comprar la plataforma en 54.20 dólares por acción. Ese es el precio del acuerdo inicial con el directorio de la empresa.
Según la CNBC, el acuerdo podría sellarse entre viernes y lunes.
Idas y vueltas
Las dos partes firmaron un contrato a fines de abril, pero Musk unilateralmente quiso abandonar el acuerdo en julio.
La red del pajarito azul lanzó una querella judicial para forzarlo a honrar su compromiso. De hecho, parecía que tenía chances de ganar en una corte.
«Es una señal clara de que Musk reconoce que sus posibilidades de ganar contra Twitter ante un tribunal de Delaware son muy bajas. Que la compra por 44,000 millones de dólares tendrá lugar de una forma u otra», sostuvo el analista Dan Ives.
Musk bombardeó a Twitter con críticas antes y luego de la firma del convenio. En particular le acusaba de censurar a los usuarios y no luchar lo suficiente contra los spams y cuentas falsas.
El multimillonario fundador de Tesla justificó su marcha atrás sobre el pacto de compra, afirmando que la proporción de cuentas automatizadas en la red social era ampliamente superior a 5% que la empresa declaraba.
Ante la querella de Twitter, la presidenta del tribunal especializado de Delaware otorgó a la empresa su pedido de un proceso rápido, mientras que Musk quería esperar al 2023 y solicitó una cantidad astronómica de datos.
Si se mantiene, el juicio irá del 17 al 21 de octubre.
«Twitter va a querer un contrato blindado esta vez, que en resumen dirá ‘danos el dinero y podemos cerrar’. Van a querer que Musk adelante una buena parte de la suma total» que asciende a unos 44.000 millones de dólares, comentó Adam Badawi, profesor en Derecho Comercial de la universidad de Berkeley.
Hasta el momento no se sabe por qué el multimillonario empresario habría cambiado de parecer. Ni Twitter ni los abogados de Musk respondieron a consultas de la AFP.
«Según algunas especulaciones, Musk habría tenido que pagar intereses sustanciales en caso de apelación, y por lo tanto un monto muy superior a los 54.20 dólares por acción» acordados con Twitter, especuló Badawi.
Preocupaciones
Musk pareció ganar terreno en su causa cuando Peiter Zatko, exjefe de seguridad de Twitter despedido en enero, acusó a fines de agosto al grupo de importantes fallas de seguridad, en un informe enviado a autoridades estadounidenses.
Pero durante las audiencias preliminares con la jueza, sus abogados parecieron tener dificultades para sostener las acusaciones sobre cuentas falsas.
Uno de los abogados de Twitter dio cuenta de dos reportes de sociedades de análisis de datos contratadas por el empresario, Cyabra y CounterAction, que evaluaron la cifra de cuentas falsas en un rango de 11% la primera y 5.3% la segunda.
«Ninguno de los informes afirma, ni de cerca, lo que Musk dijo a Twitter y al mundo entero en su carta del 8 de julio», señaló el abogado Brad Wilson durante una audiencia.
Si la operación de compra finalmente se concreta, el riesgo de que los reguladores se opongan es bajo, según Dan Ives.
De todos modos, la percepción de que Musk sea finalmente el dueño de Twitter «causará una tormenta de preocupaciones y preguntas de parte de los usuarios y de los políticos», sostuvo el analista.
El acuerdo de abril fue recibido con recelo por sectores más a la izquierda y alegría por sectores a la derecha del espectro político, por la idea de que Musk podría flexibilizar las reglas y la moderación de contenidos.