Imagen: Diego Ventura
- Las elecciones presidenciales están cerca y constantemente se observan los símbolos de los partidos políticos; un burro por el Partido Demócrata y un elefante por el Partido Republicano.
- Aunque las administraciones cambian, los candidatos son diferentes y las leyes también, el burro y el elefante han prevalecido desde hace más de 100 años, formando parte de la cultura visual estadounidense.
- Ambos animales comenzaron a popularizarse gracias al caricaturista Thomas Nast, quien trabajo en Harper’s Weekly de 1862 a 1886.
Las elecciones presidenciales de Estados Unidos están cada vez más cerca y a medida que el día de la contienda se aproxima podemos ver en los medios imágenes de elefantes y burros con estrellas y los colores de la bandera estadounidense, pero ¿qué significan estos símbolos?
Se trata de las mascotas de los dos partidos políticos de nuestro vecino del norte y de acuerdo con un reportaje especial de CNN, los dos son pilares de la cultura visual de Estados Unidos y para ellos son tan reconocibles como Santa Claus y el Tío Sam. Y aunque ambos símbolos comenzaron como una sátira, actualmente, los dos animales son sinónimo de orgullo.
El elefante, para el partido Republicano y el burro, para el Partido Demócrata, son íconos de la política estadounidense y de la democracia del país. De acuerdo con el artículo “Political Animals: Republican Elephants and Democratic Donkeys”, publicado por Smithsonian Magazine, ambos ‘mascotas’ aparecieron por vez primera a mediados del siglo XIX y se popularizaron gracias a uno de los caricaturistas políticos más severos en la historia americana, Thomas Nast, quien trabajó en Harper’s Weekly de 1862 a 1886.
El burro demócrata y el elefante republicano
Los historiadores han afirmado que Nast, un caricaturista nacido en Nueva York entre 1840 y 1850, era una persona grosera, vengativa y ferozmente leal al Partido Republicano. De hecho, se dice que el presidente Lincoln se refirió a Nast como su «mejor general de reclutamiento» durante su campaña de reelección.
Estos esfuerzos de “reclutamiento” muy públicos llevaron a Nast a crear los símbolos políticos familiares que han durado más que cualquiera de los partidos políticos que representan.
El primero en popularizarse fue el burro, quien aparece por primera vez el 15 de enero de 1870 en la caricatura titulada “Un burro vivo pateando a un león muerto. ¡Y qué león! ¡Y qué burro!” (“A live jackass kicking a dead lion. And such a lion! And such a jackass!”), la cual dio por iniciado el legado del burro como un símbolo demócrata.
Pero, ¿por qué un burro?
El caricaturista eligió un burro como una clara alusión a los demócratas, quienes habían sido asociados con ese animal en 1828 durante la campaña a la presidencia de Andrew Jackson. El candidato había sido apodado como el burro, ya que según sus detractores era una persona poco inteligente.
No obstante, Jackson acogió el apodo para dejar de lado cualquier connotación negativa del animal y por el contrario resaltó sus cualidades como su firmeza, determinación y modestía.
Durante su presidencia, el símbolo permaneció asociado a Jackson y, en menor medida, al Partido Demócrata. Y aunque la asociación fue olvidada, luego de 30 años Thomas Nast la revivió.
¿Y el elefante?
El elefante comenzó a popularizarse algunos años más tarde, en 1874 con otra caricatura mordaz titulada «Pánico de la tercera administración: Un burro que portaba la piel de un león, rugía y se divertía en el bosque asustando a todos los torpes animales que se cruzaban en su camino» (“The Third Term Panic: An ass, having put on the Lion’s skin, roamed about in the forest, and amused himself by frightening all the foolish animals he met with in his wanderings”).
En los meses previos a las elecciones intermedias de aquel año, el diario New York Herald, inclinado a los candidatos demócratas, había publicado varias notas asegurando que el presidente Ulysses Grant, un republicano, tenía el plan de postularse a un tercer mandato en 1876, algo que en esos tiempo no era ilegal, pero sí muy mal visto.
Nast, aunque era un orgulloso republicano, dibujó al Herald como un burro envuelto en la piel de un león, asustando a los otros animales con historias salvajes de una dictadura de Grant. Entre estos animales se encuentra un enorme elefante, llamado “El voto republicano”, que parece estar a punto de caer por un precipicio.
Esta fue la manera del caricaturista de criticar a su propio partido, dibujándolo como como una criatura grande y poderosa, pero que tiende a ser peligrosamente descuidada cuando está asustada.
Aunque también podría tener otro significado
De acuerdo con Jimmy Stamp, autor del artículo publicado en Smithsonian Magazine, el paquidermo político también podría estar inspirado en la frase idiomática anglosajona ‘ver el elefante’ (seeing the elephant), una referencia a la Guerra Civil y un posible recordatorio de la victoria de la Unión.
Cualquiera que sea la razón, la popularidad de Nast y el uso constante del elefante aseguraron que permanecería en la conciencia estadounidense como un símbolo republicano.
Y aunque los demócratas nunca adoptaron oficialmente el burro como símbolo, es un animal del que no pueden escapar, por su parte, los republicanos se sienten orgullosos de su elefante como símbolo.