Estados Unidos repatrió esta semana a 124 mexicanos en el primer vuelo del año que transporta deportados en el marco de un acuerdo según el cual México se compromete a trasladarlos dentro de su territorio, informaron el viernes autoridades de migración.

El vuelo partió el jueves desde Tucson, Arizona, detalló el Servicio de Inmigración estadounidense (ICE) en un comunicado.

Es el primero del año calendario, aunque el segundo del año fiscal 2020 que comenzó en octubre.

El anterior vuelo realizado bajo el Procedimiento de Repatriación al Interior de México (PRIM) partió también desde Tucson el 19 de diciembre con 150 deportados a bordo.

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Según ese acuerdo, México provee transporte adicional a las ciudades de origen de las personas deportadas.

Las autoridades estadounidenses suponen que esta medida va a reducir los esfuerzos de los deportados por volver a intentar ingresar a Estados Unidos ilegalmente.

«Estos vuelos de repatriación interior a México demuestran nuestra resolución de capturar y remover a aquellos que cruzaron ilegalmente la frontera», dijo Mark Morgan, jefe interino de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).

Reintegración

Las autoridades estadounidenses esperan que, al enviar a los repatriados a sus ciudades de origen, éstos se reintegrarán a sus comunidades en lugar de ser tentados nuevamente por los «coyotes», los traficantes de personas que les cobran por ayudarlos a atravesar la frontera.

IRI comenzó como un programa piloto en 2012 y hasta 2013 se firmó como una iniciativa permanente, añadió ICE.

El gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, defiende una línea dura con la inmigración irregular.

Esta política ha sido el eje de su gobierno y de la campaña que lo llevó a la Casa Blanca.