Imagen: Twitter: @lopezobrador_
- Hasta junio había 226,916 presos, de los que 92,595(40%) estaban en prisión preventiva.
- El 25 de agosto de 2021 AMLO emitió un decreto para identificar y eventualmente gestionar la excarcelación de personas presas sin sentencia y víctimas de tortura.
- «Algo que es cierto es que no han podido dos secretarios de Gobernación sacar a quienes están ahí (presos) y está demostrado que fueron torturados», dijo en conferencia.
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), reconoció este lunes falta de resultados en su política para sacar de la cárcel a personas no sentenciadas o torturadas por agentes del Estado en prisión preventiva.
«Algo que es cierto es que no han podido dos secretarios de Gobernación sacar a quienes están ahí (presos) y está demostrado que fueron torturados. Y es cierto porque los procedimientos judiciales son de lo más complejos», dijo en conferencia de prensa.
Hasta junio había 226,916 presos, de los que 92,595(40%) estaban en prisión preventiva. Algunos llevan años sin sentencia.
«No hay entusiasmo, no hay voluntad en algunos funcionarios de hacer justicia. Hay todavía mucho burocratismo», añadió. Aunque aseguró referirse a funcionarios «en general», el mandatario izquierdista centró sus críticas en el sistema de justicia.
«Quedaron las prácticas estas de que falta el oficio del juez y no se ha estudiado bien el expediente», afirmó López Obrador. Con esto se refirió al caso de una mujer que no ha logrado recuperar la libertad pese a que el propio presidente de la Suprema Corte de Justicia, Arturo Saldívar, está involucrado.
El 25 de agosto de 2021 AMLO emitió un decreto para identificar y eventualmente gestionar la excarcelación de personas presas sin sentencia y víctimas de tortura. A la fecha, los avances en este sentido son escasos.
Dicha norma también establece la posibilidad de dejar libres a reos de la tercera edad con enfermedades crónicas que no estén acusados por delitos graves.
López Obrador pidió este lunes a su secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, empeñarse en la ejecución del decreto para que «los que están injustamente en la cárcel, que son inocentes, los liberen de inmediato».
El caso de Israel Vallarta
El presidente también se refirió concretamente al caso de Israel Vallarta, encarcelado y sin sentencia desde 2005. Tiene cargos de secuestro, delincuencia organizada y posesión ilegal de armas. «Ya hay elementos suficientes, pedir a la fiscalía que se desista» de la acusación, indicó.
Vallarta fue detenido junto con Florence Cassez, condenada por secuestro. Sin embargo, en 2013 la Suprema Corte de Justicia ordenó su liberación por violaciones al debido proceso. Este caso provocó un conflicto diplomático entre México y Francia.
Alejandro Encinas, subprocurador de Derechos Humanos de la secretaría de Gobernación, dijo que la presunta tortura que sufrió Vallarta durante su detención debería «invalidar» las pruebas obtenidas posteriormente.
No obstante, el secuestro está catalogado en México como delito grave.
La Suprema Corte debatirá el próximo lunes si anula o no la prisión preventiva de oficio.
