Imagen: AFP
- Una de las medidas que la Ciudad de México está analizando para evitar contagios de Covid-19, es que la entrada al Centro Histórico sea en distintos días según el apellido.
- El corazón de la capital mexicana es desde hace décadas un activo corredor comercial en el que, a buen precio, se surten quienes tienen pequeños negocios o profesionales.
- «Me parece que están un poco exageradas las medidas. Cada uno tenemos diferentes necesidades, en diferentes tiempos. ¡Imagínese, que te restrinjan (el acceso) por tu apellido!», dijo un comerciante.
Las autoridades de Ciudad de México explotan su inventiva para combatir los contagios de covid-19 y ahora quieren que los habitantes acudan al centro histórico en días distintos según su apellido.
El corazón de la capital mexicana es desde hace décadas un activo corredor comercial en el que, a buen precio, se surten quienes tienen pequeños negocios o profesionales como plomeros, electricistas, peluqueros, carpinteros, entre otros oficios.
Alberto Velasco, comerciante de 50 años, esperó este lunes más de 20 minutos formado en una larga fila para ingresar a la calle Corregidora, donde iba a comprar material para su negocio de publicidad, cerrado durante tres meses por la emergencia sanitaria.
«Me parece que están un poco exageradas las medidas. Cada uno tenemos diferentes necesidades, en diferentes tiempos. ¡Imagínese, que te restrinjan (el acceso) por tu apellido!», dijo a la AFP Velasco en tono sarcástico.
El sábado, el gobierno llamó a los ciudadanos a acudir voluntariamente al centro según la primera letra del apellido: de la «A» a «L» lunes, miércoles y viernes; y de «M» a «Z» martes, jueves y sábado.
«Aunque las ventas están muy bajas, atrasarme un día más implicaría afectaciones a mi economía y hacia mi familia», añadió riendo este hombre que en teoría debería ir el martes.
Otros sí quieren que se cumpla el calendario.
«Que vengan por apellido la verdad está muy bien (…) Es conciencia de cada quien. ¡La semana pasada, que nos dejaron reabrir, fue un mar de gente!», opinó Alan Martínez, empleado de una tienda de ropa.
El comercio del centro reabrió la semana pasada tras permanecer cerrado desde finales de marzo. Pero la gran afluencia de compradores y numerosos curiosos obligó a suspender actividades durante el fin de semana para reforzar medidas sanitarias.
Centro Histórico abarrotado
Este lunes nuevamente la zona lucía abarrotada, pese a varios filtros instalados para regular el ingreso. Los policías que vigilaban el paso no preguntaban el apellido de quienes llegaban.
La AFP observó a familias completas deambulando, muchos sin tapabocas y sin guardar distancia.
«Me enteré de que iban a medir la temperatura (a los visitantes) e iban a traer caretas, lo cual no veo que suceda», dijo Brenda Ramírez, que viajó desde el suburbio de Tlalnepantla para comprar material de carpintería.
Con altavoces se llama a los visitantes a portar cubrebocas, usar gel antibacterial y a evitar pasar más tiempo en la zona del estrictamente necesario.
Las autoridades también decidieron cerrar tres estaciones de metro de la zona.
Ciudad de México inició la semana pasada su reapertura comercial cuando la pandemia de covid-19, que deja 6.963 fallecidos en la capital, sigue en niveles críticos.
México, con 127 millones de habitantes, registró hasta este domingo 256.848 casos positivos y 30.639 defunciones, según el balance oficial. Es el quinto país más enlutado por la pandemia.