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- De acuerdo con el seminario de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, varios aspirantes tienen relación con criminales.
- Esto golpea fuertemente la democracia del país.
- ¿Qué estrategia se sigue para el combate a este fenómeno? Entérate.
Las elecciones de este año se acercan y las y los candidatos están «en la mira» del electorado en México. Sin embargo, se ha comprobado que algunos de ellos tienen vínculos con el crimen organizado.
De acuerdo con el seminario «Gobernanza ante la criminalidad: los riesgos para las elecciones de 2021», organizado por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, hay otros puntos preocupantes para la contienda.
¿Cuántos están involucrados con crimen organizado?
De acuerdo con las y los expertos, al menos 23 contendientes en las elecciones intermedias del país tienen relación conocida con el crimen organizado.
«55% buscan una alcaldía, 23% una diputación federal o local y 22% una gubernatura», detalla la UASLP en un comunicado.
Su vínculo se da a través del financiamiento de las campañas, el posicionamiento de candidatas o candidatos, violencia política e intimidar a la gente para que voten por quienes ndiquen.
«El control criminal supone un riesgo grave para la estabilidad democrática y la gobernanza del país. A la fecha, no existen estrategias integrales de las autoridades públicas para frenarlo», explicaron.
Más consecuencias
Según las y los participantes, el propósito de estas bandas a través de la gobernanza criminal, además de mantener el poder, es estar cerca de información que solo debe competerle a las dependencias.
Pueden «acceder a información privilegiada sobre estrategias de seguridad y grupos económicos; contar con la protección de policías locales; atacar a organizaciones rivales», aseguraron.
Más tarde, agregaron que también permite que puedan hacer lavado de dinero y tener recursos públicos.
Entre las y los panelistas estuvieron María Elena Morera, presidenta de Causa en Común; Amalia Pulido, docente investigadora del CIDE, y Marisol Ochoa, profesora investigadora de la Universidad Iberoamericana.
Además de Víctor Hernández, profesor investigador del CIDE; Juan Mario Solís, docente investigador de la UASLP, y Marcelo Moriconi, profesor investigador del Instituto Universitario de Lisboa.
