Que algunos órganos de gobierno violen la presunción de inocencia es un efecto corruptor del juicio a diversos personajes acusados por algún delito, asegura el experto en Derecho Constitucional del ITAM, Marcos Perafán.

Lo anterior ante la polémica que surgió luego de que, durante una cena con embajadores y cónsules de México la semana pasada, el fiscal general Alejandro Gertz Manero señalara que existen unidades del gobierno que no respetan la presunción de inocencia. 

“Hay unidades, no de la Fiscalía, sino del gobierno que no respetan esa presunción”, señalando que ponen en riesgo los procesos.

Para el experto, una acusación como la dicha por el fiscal general es algo que debe ser considerado de gravedad.

“El problema de que no se respete la presunción de inocencia o de que una persona sea juzgada a través de juicios mediáticos, lo que tiende a provocar es lo que en su momento la Corte construyó como el concepto de un efecto corruptor del juicio, eso quiere decir que están generando una idea al juzgador, a los ministerios públicos o los testigos que intervienen en los procesos penales sobre la culpabilidad anticipada, esto sin conocer los hechos de cada uno de los casos”, comentó.

AMLO promete ser cuidadoso

Tras la polémica por las palabras del fiscal, el presidente López Obrador habló en la conferencia mañanera del jueves 9 de enero aseguró que las instancias deberán ser más cuidadosas al informar, incluida presidencia.

“Ya estamos buscando entendimiento, que haya una sana relación, que haya comunicación para definir qué se puede informar, qué no se puede informar. Qué es lo que afecta el llamado debido proceso, cuáles son los límites que si puede hacer la Unidad de Investigación Financiera en cuanto a información y qué no puede hacer”, dijo.

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Sin embargo, para el experto es más grave de lo que parece.

“Cuando el fiscal dice que hay algunas instancias del gobierno federal que no respetan la presunción de inocencia es muy grave la acusación, en medida de que reconoce que hay autoridades de la administración pública que ha presuntos culpables ya los dan por culpables, sin haberse desahogado todas las etapas dentro del procedimiento penal”, comentó.  

Asimismo, Perafán ejemplificó algunos dichos del propio presidente López Obrador, quien en diversas ocasiones ha tachado de corruptos a algunos personajes públicos.

“Lo podríamos ver como desde el siguiente punto de vista, recientemente incorporaron como delito grave a la corrupción, en el artículo 19 de la Constitución, y el presidente, vamos a ser francos, reiteradamente ha acusado o señalado directamente a algunos individuos de ser corruptos, esto es de haber cometido algún delito de tal magnitud y sin respetar el debido proceso”, precisó.

Tal es el caso de la mañanera del 29 de septiembre de 2019, cuando calificó de corrupto al empresario Claudio X. González de Mexicanos contra la Corrupción.

“Hay una asociación que se llama Mexicanos por la Corrupción, ¡ah!, me equivoqué, Mexicanos en favor de la Corrupción, que dirige Claudio X. González y otros adversarios nuestros que se han dedicado a sabotearnos legalmente, son lo que promueven los amparos en contra de las obras y que no quieren que hagamos nada”, aseguró el mandatario.

¿Qué es la presunción de inocencia y por qué es tan importante respetarla en todos los niveles de gobierno?

Perafan explicó que la presunción de inocencia surgió ante la necesidad de un cambio en el sistema penal acusatorio, en donde anteriormente el implicado era culpable hasta que se demostrara lo contrario.

En junio de 2008 se llevó a cabo la reforma constitucional en materia de justicia penal y seguridad pública, modificando la manera en que se venía impartiendo justicia en materia penal en nuestro país.

El Perafán detalló que se pasó de un sistema inquisitivo, caracterizado por un proceso oscuro y sigiloso donde la principal prioridad era acreditar la responsabilidad del imputado, a un sistema acusatorio en el cual la finalidad es el esclarecimiento de los hechos, proteger al inocente y procurar que el culpable no quede impune.

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“La presunción de inocencia es una garantía para que ninguna persona sea acusada sin sustento, se presume de la inocencia de las personas porque eso obliga a la autoridad acusadora a ofrecer las pruebas necesarias para acreditar su probable responsabilidad y no al acusado como anteriormente se hacía”, explica.

Por ello, violar el debido proceso y acusar a una persona de algún delito sin antes haber acreditado la culpabilidad es vulnerar las garantías y derechos de los procesados.

“Sobre todo, tomando en cuenta los altos índices de aprobación del presidente, su opinión no es la de cualquier periodista o ciudadano, es una opinión calificada que representa a la máxima autoridad”, señala.