“Voy a volver en cualquier momento”, dijo Evo Morales a los periodistas que lo entrevistaron en un hotel de la Ciudad de México.

Aquel hombre que en 2006 se convirtió en el primer presidente indígena de Bolivia, hoy se encuentra lejos de su país, exiliado en tierras mexicanas y de acuerdo con sus palabras, esperando volver a la tierra que lo vio nacer.

Morales, quien se asilo en nuestro país, cobijado por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, aseguró a diversos medios internacionales que le sigue gustando levantarse de madrugada como lo hacía en La Paz.

Cada foro que le dan desde su exilio, Morales lo utiliza para hablar sobre la “dictadura” que se sostiene en Bolivia, encabezada ahora por Jeanine Áñez y que será resistida por los movimientos sociales e indígenas.

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Según recoge la BBC en una entrevista realizada por Gerardo Lissardy, el exmandatario acusa a Estados Unidos del proceso que lo llevó a renunciar a su cargo.

Además insiste en que su triunfo en las elecciones del pasado 20 de octubre es nada más que legítimo.

Para Morales, una conspiración entre la derecha, la policía, las Fuerzas Armadas y la OEA fue lo que determinó su derrocamiento.

AFP

¿Por qué se fue de Bolivia?

En medio de días intensos de encuentros con reporteros y periodistas de medios mexicanos e internacionales, Evo responde a la pregunta que todos se hacen ¿por qué se fue de Bolivia?

Al ser un mandatario salido del pueblo y para el pueblo, resulta contradictorio pensar que sea un personaje tenga que salir huyendo de un país en donde millones le expresan cariño y respeto.

No obstante, Evo habla así de las circunstancias que lo obligaron a dejar su tierra.

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“Los equipos de seguridad me hacen leer los mensajes recibidos: «Entrégame a Evo, vamos a operar».

Llamadas telefónicas, mensajes: «Mandaré 50 palos grandes». Yo preguntaba: ¿qué es 50 palos grandes? 50 mil dólares para quien me entregue”, asegura.

Y ante la insistencia del corresponsal de la BBC sobre los verdaderos motivos de su salida, Morales contesta: “¿Usted quiere verme muerto? Te pregunto. ¿Quiere verme muerto? Dígame… Respóndame, como periodista, ¿quiere ver muerto al Evo?”.

AFP